Comida congelada: Consejos para congelar alimentos

La congelación de los alimentos es una técnica muy antigua de conservación que se ha mejorado de forma continua. En la actualidad es aplicable a todo tipo de alimentos: comidas precocinadas, panes, frutas, verduras, etc. La ventaja principal radica en que detiene, no elimina, el crecimiento de posibles patógenos (hongos, bacterias, levaduras, helmintos) en los alimentos sin tener que adicionar sustancias químicas, asegurando que su consumo sea con las máximas garantías de higiene, seguridad y calidad. (Gimferrer-Morató, 2011)

¿Existen más ventajas de congelar mis alimentos? Las principales ventajas de congelar alimentos son: permite prolongar la vida útil de los alimentos, reduce el desperdicio por alimentos estropeados, permite planificar la compra, hace que aproveches ofertas, que compres productos de temporada a mejor precio, todo ello para ser aprovechado posteriormente. (Fernández-Guerrero, 2007)

¿Son inocuos los alimentos que están en mi congelador? Muchas personas no están seguras de la inocuidad de sus productos almacenados en sus propios congeladores. La confusión se basa en el hecho de que pocas personas entienden cómo el congelador protege sus alimentos y cuál es el mejor método de congelarlos. A continuación, se tratará cierta información de cómo congelar los alimentos de forma inocua y por cuánto tiempo se deben mantener congelados.

  1. Aspectos por considerar:
  2. Temperatura: la temperatura debe ser inferior a -18°C, ya que es donde mejor se preserva la calidad nutritiva de los alimentos.
  3. Tiempo: para que la calidad del producto no se vea afectada, la congelación debe realizarse en el menor tiempo posible.
  4. Envases: utiliza envases de vidrio o plástico, rígidos y herméticos para congelar los alimentos ya que son los más adecuados, o bien, bolsas específicas para congelar (no cualquiera de plástico), con el fin de evitar la abrasión por congelación.
  5. Tipo de alimentos: puede congelarse casi todo tipo de alimentos, aunque algunos alimentos pierden parte de sus propiedades. La excepción para congelar son productos enlatados, huevos en cascarón, algunas frutas, mayonesa, etc. (Unidos, 2010)
  6. Consejos para congelar:
  • Extrae todo el aire posible, porque el oxígeno evita la evaporación y crecimiento de las bacterias.
  • Evita congelar las latas, alimentos sueltos y calientes.
  • Las papas y las pastas no son aptas para congelar. Las papas porque se endurecen y las pastas porque se ablandan en el congelador.
  • Una opción para congelar las verduras es escaldarlas (sumergir las verduras por dos minutos en agua hirviendo) o cocerlas, una vez limpias, para detener el proceso de deterioro del alimento y eliminar las bacterias.
  • No congeles los alimentos que hayas previamente descongelado, ya que aumenta su contenido bacteriano.
  • Puedes congelar todo lo que hayas cocinado, aunque procedan de alimentos previamente congelados (en casa o directamente de la tienda).
  • Congela en pequeñas raciones, porque cuanto más rápido se congele la comida, más fresca estará al descongelarla.
  • Ten en cuenta que la temperatura del congelador, el tipo de envase para congelar y el proceso de descongelación posterior que inciden en la conservación de las propiedades originales de los alimentos.
  • Etiqueta los productos con fecha de congelación y su contenido, y recuerda: primero en entrar, primero en salir.
  • Vigila los envases rotos, pueden dañar el alimento y no ser apto para el consumo.
  • Deja al menos un margen de 1 a 1,5 cm en la parte superior del envase o recipiente, ya que al congelar los alimentos y líquidos suelen expandirse un poco.
  • Verifica que los alimentos no tengan escarcha o que su envase no esté demasiado blando, supondría la pérdida de la cadena de frío en algún momento.
  1. Puntos de interés:
  • Fecha de caducidad: no debe olvidarse que la actividad enzimática de los patógenos no cesa, sino que se ralentiza; las enzimas mantienen una actividad paulatina de degradación de los alimentos, por lo tanto, los productos congelados tienen también una fecha de caducidad.
  • Conservación de los nutrientes: el proceso de congelamiento no destruye los nutrientes, sin embargo, el nutriente más sensible a la congelación es la vitamina C. Alimentos como las frutas rojas o las verduras pueden llegar a perder un 15% del contenido de esta vitamina en el momento de la descongelación. No obstante, siempre que la cadena de frío no se rompa y que la materia prima sea de calidad, las pérdidas generales de nutrientes serán escasas.
  • Frescura y calidad: la frescura y calidad de los alimentos al momento de la congelación, afecta la condición del alimento congelado. Si el alimento es congelado durante su punto de mayor calidad, entonces este alimento descongelado tendrá mejor sabor que uno que fue congelado al final de su punto de calidad.
  • ¿El congelar destruye las bacterias y parásitos? El congelar a -18°C inactiva muchos de los microorganismos, bacterias, levaduras y hongos presentes en los alimentos. Una vez, descongelados, sin embargo, estos microorganismos pueden activarse nuevamente, multiplicándose en las condiciones apropiadas a niveles que pueden ocasionar enfermedades transmitidas por alimentos. (Umaña-Cerros)

Tiempo estimado de congelación

  • Pan y bollería: máximo 3 meses.
  • Tartas y pasteles horneados: máximo 6 meses.
  • Quesos: máximo 6 meses.
  • Yogur: máximo 2 meses.
  • Huevos (sin cáscara): máximo 12 meses.
  • Frutas: máximo 11 meses.
  • Verduras: máximo 12 meses.
  • Salsas: máximo 1 mes.
  • Caldos, sopas y cremas: máximo 6 meses.
  • Frutos secos: máximo 2 años.
  • Comidas: máximo 2 meses.
  • Galletas caseras: máximo 2 meses.

¿Por qué se puede optar por alimentos congelados?

  • Están más protegidos frente a patógenos que pueden contaminar los alimentos.
  • Mantienen todas sus cualidades nutricionales y organolépticas de manera natural, siempre y cuando se haya mantenido la cadena de frío, sin la adición de contaminantes químicos que desarrollen esta función.
  • Resulta más económico, ya que se aprovecha el 100% del producto. En ocasiones, los alimentos frescos pierden parte de su contenido al limpiarse.
  • Se pueden congelar todo tipo de productos durante todo el año, una garantía para seguir una dieta equilibrada y variada.

 

Referencias

Fernández-Guerrero, S. (2007). Almacenamiento y conservación de alimentos. En S. Fernández-Guerrero, Recetas con aprovechamiento y consejos (págs. 45-49). HISPACOOP. Recuperado el Octubre de 2017, de https://gastronomiaycia.republica.com/wp-content/uploads/2013/12/librorecetasaprovechamientohispacoop.pdf

Gimferrer-Morató, N. (30 de Marzo de 2011). consumer.es. Obtenido de consumer.es: http://www.consumer.es/seguridad-alimentaria/sociedad-y-consumo/2011/03/30/199587.php

Umaña-Cerros, E. (s.f.). fusades.org. Obtenido de fusades.org: http://fusades.org/sites/default/files/investigaciones/manual_manejo_de_frio_para_la_conservacion_de_alimentos.pdf

Unidos, S. d. (Abril de 2010). fsis.usda.gov. Obtenido de fsis.usda.gov: https://www.fsis.usda.gov/wps/wcm/connect/931068e4-c4c3-4f00-8222-19d40fcd034d/Freezing_and_Food_Safety_SP.pdf?MOD=AJPERES